Soy fan de Darren Aronofski. Me gusta Pi pero idolatro Requiem por un sueño es tan buena que te dan ganas de vomitar (y lo digo sin sarcasmo). Por eso tengo mucha fe en su nueva película The fountain.


Hay que reconocer que le ha costado lo suyo hacerla, pero que Brad Pitt se dé de ostias por hacerla me parece una buena señal. Que haya juntado a Hugh Jackman y Rachel Weisz me parece un mérito (y que se la pase por la piedra otro). De Aronofski ya he hablado alguna vez por aquí y muy bien.

Por eso no sé si cagarme en los críticos y el público que abuchearon The fountain en Cannes. No sé si se le ha ido la pinza del todo a Aronofski y nos ha presentado un festival de psicotropía sin fondo como Roger Corman con una lámpara de lava. No sé si los cannienses no están preparados para sentir una película. Y sobretodo no sé porqué todavía no me he leído el cómic que compré en Junio.

Como hace tiempo aprendí a fiarme únicamente de mi opinión (y me va muy bien así, gracias) sigo confiando y espero ansioso y la caquita me la haré en los fans de Roland Emmerich que abuchean toda película sin Will Smith o Milla Jovovich.

Me voy a leer el tebeo y luego te cuento. Sigh!.