, un género que ha marcado su carrera gracias a los films de los años 50. Anteriormente habia rodado dos cortos:
(inacabado).
Su siguiente trabajo fue una peliculilla de ciencia ficción, inspirada en un título de 1958,
It! the terror from beyond space, que en principio debía ser dirigida por
Walter Hill y que finalmente cayó en manos de un tal
Ridley Scott. La película en cuestión es
Alien (1979) obra cumbre del
terror gótico (gracias a la influencia que los comics de la
E.C. tienen en él) en la cual O'Bannon se reveló como un gran artesano, no sólo de la
ci-fi sino del terror como veremos más adelante.
Ojo a los mensajes subliminales
A continuación escribe
Muertos y enterrados (1981) un terror de culto fuertemente inspirado por la obra literaria de
H.P. Lovecraft y de temática zombi escrita a cuatro manos con
Ronald Shusset, con quien ya escribiera Alien. Una obra tan humilde y sencilla como imprescindible.
Poco después colabora con el clásico generacional de la animación
Heavy Metal (1981) escribiendo las historias
B-17 y
Aterrizaje forzoso. Nuevamente demuestra su pasión por la ciencia ficción en este homenaje a uno de los más importantes cómics antologicos jamás publicados. Cabe recordar que O'Bannon escribió historias para la revista Heavy Metal.
Al cabo de dos años crea el
Trueno azul (1983) un helicóptero policial
hi-tech pilotado por
Roy Scheider a las órdenes de
John Badham. Seguramente recordaréis la subsecuente serie de televisión de la cual escribió dos episodios y que nos deleitó hace varios veranos siguiendo la estela de
El coche fantástico y
El halcón callejero. Estaba protagonizada por
James Farentino (protagonista de
Muertos y enterrados y
¡Dana Carvey! inolvidable como
Garth en
El mundo de Wayne (1992) y curtido con
Mike Myers en el
Saturday night live. La película llegó a estar nominada a los Oscar a pesar de que el guión de O'Bannon y
Don Jakoby fue reescrito por su fuerte carga política.
Coño! Hightower!
En 1985 inicia la saga
Return of the living dead con
Regreso de los muertos vivientes, que da un aire más cómico a las películas de zombis de
George A. Romero y que supone su "iniciación" como director. Destaca la participación de la mítica
scream queen Linnea Quigley. Tuvo su continuación en
La divertida noche de los zombis (1988) y
Mortal zombi (Brian yuzna, 1993) (ambas imprescindibles) y dos partes más del año pasado que desconozco. En esta película se destapa la
vis cómica de O'Bannon que asegura que la historia de Romero es real y la película una tapadera para encubrir un error del ejército USA creador de los zombis.
A continuación une fuerzas con otra vez con Don Jakoby y con el grandioso (a veces)
Tobe Hooper para adaptar la novela de Colin Wilson
Los vampiros del espacio en
Lifeforce (1985). Una delirante historia de invasiones alienígenas zombis y vampirosde energia llena de épica y erotismo con unos efectos especiales destacables obra de
John Dykstra con quien trabajó en los FX de
Star Wars (1977). Rodada en Londres, está dotada de un toque europeo y a veces transgresor (para los cánones norteamericanos) sublime.
Mathilda May, chúpame la energia!Al año siguiente volvería a trabajar con Hooper (que estaba en el olimpo tras dirigir la
Poltergeist (1982) de
Steven Spielberg) y Jakoby en
Invasores de Marte (1986) remake de la película homónima dirigida por William Cameron Menzies en 1953. Con la colaboración del célebre
Stan Winston y diseños de
William Stout y unos diseños inspirados en la obra de
Gaudí .
Seguidamente retomó la saga que ayudó a crear años antes en
Aliens (James Cameron, 1986) encargándose de la creación de personajes
muchos de los cuales han pasado a la historia más friki e incluso han protagonizado sus própios cómics como la niña Newt.
En 1990, y sin abandonar la ci-fi, escribe
Desafío total para el holandés
Paul Verhoeven adaptando un relato de
Phillip K. Dick.
Dos años después diseña personajes para
Alien3 (1992) del polémico
David Fincher en un guión cargado de simbolismo religioso (también para el videojuego correspondiente) mientras que al año siguiente realiza la misma labor para el videojuego
Aliens vs Predator.
Es en 1995 cuando volverá a adaptar una historia de Phillip K. Dick en
Asesinos cibernéticos (¡¡¡ojo que hay secuela en ciernes!!!) protagonizada por
Peter Weller (¡Robocop!) en una ci-fi pura y dura con robots
pirañoides asesinos que pierde todo posible mensaje que pretendiese darle Dick sin dejar de ser divertidísima.
A continuación participa en
Hemoglobin (1997) que yo siempre he querido titular Hemogoblin, me parece más propio. Una historia en la que
Roy Dupuis busca sus raíces y encuentra el horror gracias al gran
Rutger Hauer. Carne de videoclub, pero sabrosa.
los abuelos de RoyActualmente está volcado en la franquicia que más fama le ha dado y tras diseñar personajes para
Alien: Resurreción (Jeunet & Caro, 1997) y escribir ese ñordo que es
Alien vs. Predator (2004), ambas junto a Shusset, está volcado (ja,ja,ja!) en la preproducción de la prometedora (promete dormir a las ovejas)
Alien vs. Predator 2 (2007) diseñando personajes para esos dos hermanos, técnicos de Fx, a los que les han
colgao el marrón. Lástima!
Esperemos que este ilustre desconocido vuelva a su querida serie B para entretenernos muchas hora más!